Ficha técnica:
Rayo Vallecano (2): Dimitrievski, Balliu, Catena, Lejeune, Fran García, Santi Comesaña (Unai López, minuto 62), Óscar Valentín (Ciss, minuto 73), Isi, Trejo (Pozo, minuto 83), Álvaro García (Salvi Sánchez, minuto 83) y Camello (Falcao, minuto 73)
Elche (1): Edgar Badía (A), Lirola (A), Fede Fernández, Diego González (A) (Enzo Roco, minuto 71), Quina (A) (Pere Milla (A), minuto 56), Clerc, Gumbau, Palacios, Roger (Ponce, minuto 71), Guti y Boyé (A) (Tete Morente (A), minuto 84)
Arbitro: Figueroa Vázquez
VAR: Medié Jimenez.
Goles: 0-1. Minuto 31. Boyé. 1-1. Minuto 40. Camello. 2-1. Minuto 90+5. Unai López
RAYO VALLECANO 2 (Camello y Unai López) - ELCHE 1 (Boyé)
Con una ocasión de gol en un fallo defensivo grosero, el Elche pudo sacar petróleo de su visita a Vallecas. Solo la bota derecha de Unai López logró obrar el milagro de derrotar a un equipo sólido en defensa, bien posicionado en todo el campo y con mordiente para aprovechar los regalos arriba. Pero el fútbol no siempre recompensa la disciplina sino el talento, la magia, la ambición, la fantasía... ElRayo Vallecano ganó en el 96 con uno de esos goles que se recordarán durante años. Un zapatazo a la gloria después de 96 minutos de sufrimiento. Lo que suele ser la vida en Vallecas.
Los franjirrojos intentaron sacar la apisonadora nada más arrancar el choque. El dominio, el balón, el ritmo y las ocasiones fueron suyas. A los visitantes les costaba dar dos pases seguidos ante la presión local y la grada se relamía sabiendo que el gol era cuestión de tiempo. Llegó, pero fue anulado. Y pareció que tras el tanto anulado por fuera de juego (lo era) a Lejeune, los vallecanos se desinflaron.
El Rayo se desdibujó, después de las ocasiones de Álvaro Garcia, en favor de un Elche que empezó a reclamar su protagonismo. Un desaparecido Lucas Boyé hasta el momento comenzó a perfilarse como la pesadilla nocturna para el rayismo que ya sufrimos la pasada temporada. Y si a eso le sumamos un error garrafal de Dimitrievski en la salida y de Comesaña en la marca, el resultado fue el 0-1 que llevó el nerviosismo y los silbidos a la grada.
El jarro de agua fría sacó a los rayistas del letargo. Volvió la velocidad por las bandas y Trejo se empezó a echar al equipo a la espalda. El recital del de Santiago del Estero incluyó una pared con Isi, un taconazo para Camello y la asistencia para la igualada. El joven cedido por el Atlético de Madrid se quitó un peso de encima debutando como goleador con la casaca franjirroja.
Al guión del partido se le sumó entonces una tonelada de tensión. Los nervios estaban a flor de piel como demostró la airada protesta de Iraola cuando el árbitro señaló el camino a vestuarios sin añadir ni un solo segundo cuando mejor estaba el Rayo y se mascaba el 2-1.
¡¡¡¡➕3⃣ EN VALLECAS!!!! (2-1) ⚡️
— Rayo Vallecano (@RayoVallecano) October 3, 2022
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La trifulca encendió los ánimos del respetable que pese a la pausa del descanso querían ganar a toda costa a un rival que salió agazapado en los primeros minutos del segundo acto. El Rayo Vallecano tuvo las mejores oportunidades incluyendo el ya clásico zapatazo de Isi que se fue lamiendo el palo. Al Elche tampoco le valía el empate y si Catena no hubiera estado bien colocado, Raúl Guti hubiera hecho el segundo para los visitantes con un Dimitrievski ya vencido.
Desde los banquillos se intentaba dar a ambos equipos un nuevo aire con los cambios. Iraola oxigenaba el centro del campo y la punta. El segundo de Francisco, la defensa y el centro del campo ilicitano. Cuestión de prioridades. Pero a veces no siempre la solución consiste en sumar muchos efectivos arriba sino mantener el órden y aprovechar tu oportunidad.
La seriedad defensiva del Elche se convirtió en un muro infranqueable para el Rayo Vallecano. Ni siquiera la fantasía de Trejo dejando sólo a Álvaro García desniveló el encuentro para los franjirrojos. El zurdazo del gaditano se fue demasiado cruzado dejando al Tigre con los colmillos sedientos de sangre tras llegar tan solo un segundo más tarde a esa pelota.
Quien no iba a perdonar e iba a firmar la remontada fue Unai López que se encontró un caramelo en la frontal del área y con una impresionante volea mandó la bola al fondo de la red ante el delirio de Vallecas que había sufrido 96 minutos para poder vencer al colista.