Ficha técnica:
At. Madrid (1): Grbic, Reinildo, Giménez (A), Savic (A), Molina, Lemar (Carrasco, minuto 39), Witsel (Cunha, minuto 60), Kondogbia, de Paul (Saúl, minuto 74) (A), Griezmann y Morata (Correa, minuto 60).
Rayo Vallecano (1): Dimitrievski, Balliu, Catena, Mumin, Fran García, Pathé Ciss (Unai López, minuto 87), Óscar Valentín (Camello, minuto 60), Isi (Nteka, minuto 87), Pozo (Comesaña, minuto 45), Álvaro García (Pablo Muñoz, minuto 80) y Falcao.
Arbitro: Iglesias Villanueva.
VAR: Medié Jimenez.
Goles: 1-0. Minuto 20. Morata; 1-1. Minuto 91. Falcao, de penalti.
AT. MADRID 1 (Morata) - RAYO VALLECANO 1 (Falcao, de penalti)
El Rayo afrontaba hoy el segundo derbi consecutivo tras el empate sin goles del viernes ante el Getafe en Vallecas. El de esta noche era un rival de otra liga, de otro nivel, de otra dimensión, pero cuando el balón echa a rodar, si haces bien las cosas todo se nivela. Eso pensó Iraola, que su equipo debía ser más intenso, más rápido y más inteligente que su rival si quería tener opciones en un duelo que en otros aspectos estaba exageradamente desnivelado. Para conseguir su objetivo, el técnico vallecano echó mano de un doble pivote de corte 'guerrero' con Oscar Valentín y Pathé Ciss, apostó por Pozo para suplir al lesionado Trejo y confió en Mumin en el centro de la zaga y en Falcao en punta de ataque para sorprender al equipo del Cholo Simeone.
El primer cuarto de hora deparó un partido nivelado, con un Rayo valiente y atrevido con balón y trabajador y solidario en faceta defensiva. Isi probó fortuna con un remate que obligó a Grbic, sustituto de Oblak, a detener en dos tiempos ante la siempre peligrosa llegada de Falcao, atento a cualquier rechace. El choque había arrancado bien, aunque el Atlético empezaba a poco a poco a amasar las jugadas de ataque que únicamente incomodaban a los franjirrojos en un par de centros cruzados que se pasearon sin rematador. La paciencia rojiblanca se topaba de bruces con el intenso trabajo de los franjirrojos.
Había dos premisas a cumplir, primero no cometer errores, y después aprovechar las ocasiones que llegaran. En el minuto 20, el At. Madrid penalizó con dureza un error en la salida del balón de Fran García. Robo de Griezmann, asistencia vertiginosa para Morata que de primeras cruzó ante Dimitrievski. El Rayo, que hasta ese momento lo había hecho casi todo bien, recibía un mazazo de los que en escenarios como este cuesta recuperarse.
A la media hora apareció Pozo por primera vez para pisar área y generar algo de 'run run' entre la zaga colchonera. En ataque era Isi el más bullicioso, con Falcao intentando llegar sin éxito a los centros de Fran García desde banda izquierda. Así intentaba recuperarse el equipo vallecano mientras Griezmann volvía a recobrar protagonismo con una excepcional acción de ataque en la que se escapó de todo rival que se intentaba interponer en su camino. Su centro-chut sería detenido por Dimitrievski, que de nuevo era titular en detrimento de un Diego López que tuvo su oportunidad en Almería y que no ha vuelto a aparecer.
El Rayo quería recuperar su sitio en el partido, pero no era fácil. El At. Madrid es un equipo que se posiciona bien y que, con marcador a favor, maneja perfectamente los tiempos de los partidos. Además, si retrocede unos metros cada robo de balón se convierte en ocasión de peligro. El descanso, con un gol de desventaja, era la mejor noticia que le podía llegar a un Rayo que no generó casi nada en la primera mitad.
⏸️ Final de la primera mitad en el Cívitas Metropolitano (1-0)#AtletiRayo#VamosRayopic.twitter.com/eCaCA9pGrh
— Rayo Vallecano (@RayoVallecano) October 18, 2022
En el vestuario Iraola le dijo a Pozo que se había acabado su protagonismo en el partido y a Comesaña que había llegado su turno. El juego entre líneas fue inexistente en la primera mitad y con la incorporación del gallego, el técnico vasco buscaba incomodar algo más a una zaga atlética que vivió plácidamente los primeros cuarenta y cinco minutos.
En los primeros minutos los vallecanos ya consiguieron más que en todo lo disputado anteriormente. Un gran centro de Alvaro García rematado por Pathé Ciss junto al palo pudo haber supuesto la alegría que los aficionados franjirrojos esperaban. El Rayo arrancaba con nuevos bríos, con más posesión y arriesgando más, con lo que ello supone ante un rival como el de esta noche. Los rojiblancos 'se dejaban querer' a la espera del golpe definitivo que sentenciara el choque. Pudo haberlo logrado Morata a la salida de un córner en el minuto 56, pero su remate de cabeza se marchó desviado.
Faltaba media hora, el Rayo seguía con vida en el partido, y Andoni Iraola daba un giro al guion inicial del partido sacando del campo a Oscar Valentín y dando entrada a Sergio Camello. El Rayo tenía que buscar la tecla que activara de nuevo el choque y lo hacía con el joven canterano del Atlético.
El partido seguía avanzando con poco rescatable porque el Rayo no podía y el Atlético parecía no querer hacer nada con el balón en los pies. De repente apareció Sergio Camello que, con una gran maniobra de delantero en la frontal, se hizo hueco y remató cruzado junto al palo. El Rayo crecía y tanto Isi como Alvaro se inventaban otra acción ofensiva merecedora de gol. Isi metía un pase al hueco desde el círculo central para que Alvaro buscara un remate tapado finalmente por Savic. El Rayo seguía mereciendo más cuando Falcao recibió un balón dentro del área tras otra gran jugada de Camello. La defensa local volvía a salvarse y lo hacía de nuevo cuando Catena no pudo rematar con precisión un centro de Balliu al segundo palo. Era el momento de los vallecanos en el partido y todavía quedaban veinte minutos por delante.
Griezmann quiso penalizar un nuevo error en la salida del balón, en este caso de Catena, pero su gol sería anulado por fuera de juego, y Cunha obligó a lucirse a Dimitrievski tras un remate cruzado que detuvo abajo el macedonio. El Rayo seguía con opciones, aunque también sufría las acometidas de un rival con mucho potencial como este At. Madrid.
Llegamos al minuto final del choque y el VAR iba a dar al rayismo la alegría que merecía. Una clara mano de Giménez a remate de Nteka iba a suponer el penalti que lanzó Falcao para igualar el encuentro. 1-1 y locura vallecana en el Wanda. El Rayo lograba el premio que había buscado con ahínco en la segunda mitady que deja a los vallecanos con una sonrisa y con la sensación de haber merecido lo conseguido en el Wanda.