Ficha técnica:
Rayo Vallecano (0): Luca, Advíncula, Catena, Saveljich, Fran García (Andrés, minuto 70) (A), Óscar Valentín (Pozo, minuto 60), Santi Comesaña, Trejo (Guerrero, minuto 86), Alvaro, Isi (Bebé, minuto 60) y Qasmi (Ulloa, minuto 70).
C.D. Lugo (1): Cantero, Torres (Domínguez, minuto 75), Alende, Seoane (Djalo, minuto 86), Barreiro, Hugo Rama (Ramos, minuto 74), Canella (A), Rodríguez (Herrera, minuto 45), Gerard (Juanpe, minuto 74), Campabadal y Venancio.
Arbitro: Pulido Santana.
VAR: González Esteban.
Goles: 0-1. Minuto 43. Barreiro, de penalti.
RAYO VALLECANO 0 (-.) - C.D. LUGO 1 (Barreiro (p))
Cuando dejas los deberes para el último día puede pasar de todo. Un cara o cruz que puede dar al traste con el trabajo incompleto de todo el año o puede abrirte las puertas de una segunda oportunidad. Así se presentaba el último round para el Rayo, un ser o no ser ante el C.D. Lugo, un rival que se jugaba seguir en el selecto grupo de clubes del fútbol profesional o verse abocado a un descenso amargo y doloroso.
Iraola pensó que cuando algo funciona mejor no tocarlo y en esa línea dio continuidad al equipo que logró las dos últimas victorias que nos trajeron a este partido a vida o muerte con opciones de acabar cuarto, quinto, sexto... o incluso séptimo. El Rayo dependía de sí mismo, ganando no había que pensar en nadie más. Empatando o perdiendo, era vital lo que sucediera en el Molinón.
El orden inicial del partido complacía a ambos. El Lugo cedía terreno ante el empuje del Rayo, que quería ser protagonista con el balón en los pies. Los locales manejaban el ritmo, los visitantes se 'conformaban' con las contras, conscientes de la necesidad de ambos, pero esperando que fuera el Rayo el que cometiera el primer error que les sirviera de excusa definitiva para defender a ultranza el resultado.
Tras un primer cuarto de hora en el que ambos equipos dejaron claras sus intenciones sobre el terreno de juego, sería Fran García el que se atrevería a probar fortuna con un golpeo con la zurda que le salió muy centrado y que no generó el peligro que necesitaba un partido como este. El Lugo contestó con un remate desde dentro del área que obligó a intervenir a Luca Zidane metiendo una mano salvadora para evitar el 0-1. El Rayo llegaba más, el Lugo llegaba mejor.
La primera mitad fue plana. El Rayo llegaba, dominaba el partido, ponía centros sin remate y buscaba desbordar tras mover al rival de lado a lado. El Lugo se defendía en bloque, retrasaba líneas y buscaba meter una marchita más en cada recuperación de balón. Lo intentó Comesaña, sin acierto, y también lo buscaron Qasmi o Isi. El partido se encaminaba al empate sin goles hasta que el Rayo cometió el error que el Lugo esperaba. Fran García cometía penalti y, a falta de dos minutos para el descanso, Barreiro acertaba y ponía el 0-1. Tocaba sufrir un día más.
📷⚡️ Final del primer tiempo en Vallecas (0-1)#RayoLugo#VamosRayopic.twitter.com/l7qIJhyvQL
— Rayo Vallecano (@RayoVallecano) May 30, 2021
Al Rayo le quedaban 45 minutos para arreglar una temporada de altibajos que nos traía hasta el segundo tiempo del último partido con todo por decidir. El momentaneo empate del Sporting obligaba a seguir mirando al Molinón con esperanza, pero también con mucho miedo. El Rayo jugaba con fuego. Un hipotetico gol asturiano obligaba al Rayo a hacer dos y remontar el partido de hoy. Ahí estaba el riesgo.
La segunda parte subió en cuanto a tensión, se notaba en los gestos de los futbolistas, en los gritos y los decibelios sobre el terreno de juego. Los nervios no eran ni de lejos el mejor aliado para un Rayo que neesitaba serenidad para hacer las cosas bien y buscar el empate. El Lugo seguía encerrado en torno a su área y sobrevivía a las llegadas franjirrojas. Alvaro pudo empatar con una buena llegada que finalizó rematando junto al palo. Se escapaba el primer cuarto de hora sin que el rayismo pudiera esbozar una tímida sonrisa.
Tan mal lo vería Iraola que hoy sí decidió "arriesgar" dando entrada a Bebé, ya recuperado de sus problemas físicos. Junto a él se incorporó Pozo para refrescar la medular y buscar más artillería ofensiva. Quedaba tiempo y el Rayo apretaba. Comesaña remató a bocajarro un balón que tocó Cantero sobre la línea de gol para enviarla al larguero. El Rayo tenía la más clara de todo el partido y terminaba estrellándose en la madera.
Lo buscaron Bebé y Alvaro desde lejos, pero nada, no había puntería, mientras los nervios seguían aumentando de manera inversamente proporcional al tiempo que quedaba por delante. Se mascaba la tensión en Vallecas.
Quedaban diez minutos y el asedio ya era total y absoluto. El Lugo alargaba cada parón hasta el infinito y los cambios se eternizaron mientras era atendido uno y otro jugador con "problemas físicos". Cantero salvó como pudo un remate lejano enviándolo a córner con una buena estirada. El Rayo vivía permanentemente instalado en campo gallego, pero no llegaba el empate.
Andrés pudo empatar, pero la mejor noticia era que el Sporting perdía en el Molinón y la cosa estaba hecha. Aún así, el Rayo lo siguió intentantado hasta el final.
El equipo de Iraola se salvaba por la campana y, pese a la derrota, jugará el playoff de ascenso contra el C.D. Leganés.