Pep Chavarría fue el invitado especial del EN CLAVE DE FRANJA 6x30 de este lunes en Pasión por el Rayo Radio. El lateral franjirrojo, que actuó de extremo en los últimos partidos, fue el autor de las dos asistencias que permitieron a RDT marcar tanto en el Bernabéu como ante el Villarreal el pasado fin de semana. Hablamos con él de este y del resto de temas de actualidad del Rayo Vallecano.

Victoria ante el Villarreal, con tormentón en la primera parte en lo meteorológico y con tormenta futbolística del Rayo en la segunda.

En la primera parte era muy difícil jugar, ya visteis lo que llovía. Estuvimos muy incómodos, igual que el rival, pero en la segunda parte empezamos a apretar, tuvimos muchísimas ocasiones y creo que fuimos justos vencedores.

El gol de RDT llegó tras un asistencia tuya.

Alvaro me dio un pase al espacio, levanté la cabeza y vi en el área a Raúl (de Tomás), también creo que estaba Isi por detrás, y lo que hice fue centrar para intentar superar al primer central y que el espacio que había generado entre los dos centrales lo pudiera aprovechar.

Y vaya si lo aprovechó.

Sí, fue un golazo.

Es tu segunda asistencia consecutiva, ambas a Raúl de Tomás, ¿empezamos a pensar ya en la asociación Pep-RDT?

Asistir a RDT es fácil, porque tiene un don para el gol y para intuir dónde va a caer la pelota. Tenemos grandes delanteros en el equipo, Raúl de Tomás, Falcao, Camello..., darles una asistencia de gol a este tipo de jugadores es muy fácil.

¿Cómo te encontraste tú en el partido ante el Villarreal?

Bien. En la primera parte fue muy difícil porque, como te decía, estuvimos muy incómodos, con la ropa mojada era muy difícil porque cogía mucho peso. Además corrimos mucho, porque el Villarreal es un equipo que trata muy bien el balón y te someten atrás, aunque quisimos presionar arriba y tuvimos algún robo. Pero en la segunda parte fuimos a por el partido, fuimos más intensos que ellos y aprovechamos nuestras ocasiones.

Yo no esperaba abrir el programa de esta semana hablando de las opciones europeas del Rayo, pero llegamos a la última jornada con esa posibilidad.

El día del Elche nos fuimos muy tristes, porque eran tres puntos muy importantes. Luego hicimos muy buenos partidos ante el Betis o en el Bernabéu y sacamos los tres puntos ante el Villarreal, aunque es cierto que si hubiéramos sacado algún punto más antes, estaríamos hablando de tener más opciones, pero también creo que hemos ganado en campos muy difíciles este año y vamos a pelear a muerte contra el Mallorca.

¿Cómo se afronta un partido como ese en la última jornada? ¿Pendientes del resto de resultados?

Yo prefiero no saber nada, jugar el partido yendo a muerte como hemos hecho en todos los partidos de liga. Es algo muy bonito intentar meter al Rayo en Europa y todo el equipo está muy motivado para conseguir este logro.

¿Qué balance haces de tu primer año en el Rayo?

Vengo de segunda división, sabía cuál era mi rol. Cuando llegas a un equipo nuevo, con su sistema, sus jugadores, es difícil entrar. Llevo trabajando muy duro todo el año para poder tener minutos, para jugar algún partido de titular, y al final, gracias a mi trabajo y al de mis compañeros, he tenido algún minuto nuevo y he podido ayudar al equipo, que es lo más importante para mí.

¿Qué referencias tenías del Rayo? ¿Por qué decidiste venir a Vallecas?

Me decanté por el sistema que tenía el Rayo, por el míster, y porque al final escoges ir donde más te quieren y el Rayo apostó fuerte por mí y no me lo pensé dos veces.

El domingo se despidieron de Vallecas tanto el técnico como alguno de tus compañeros, ¿qué te pareció ese momento en el estadio después del partido?

La afición que tenemos es increíble. Yo siempre digo que jugar aquí en Vallecas es muy difícil, es una olla a presión. Creo que para los rivales es muy complicado venir a jugar aquí en Vallecas y eso hay que aprovecharlo. La despedida que le hicieron a los jugadores y a los entrenadores... creo que hay pocos equipos que hagan una despedida de esta manera. Se lo merecen por todos los años que han estado aquí y por lo que han conseguido. Es un club muy familiar y es un orgullo defender este escudo.

¿Te imaginas una despedida así dentro de muchos años?

Es lo más bonito del fútbol, que la gente se lleve un buen recuerdo de ti y te aprecien. Al final, todos los jugadores buscamos eso, sentirnos queridos y dar el máximo para que los aficionados disfruten y cuando te vas de un club de esta manera, que toda la gente reconoce tu trabajo, tu sacrificio y constancia en el campo, que lo has dado todo, es muy bonito.

¿Hubo emoción y alguna lágrima en el vestuario o no?

En ese momento había mucha alegría, porque como todavía quedaba un partido y no había llegado el final, no estábamos pensando en eso.

El Rayo cumple 99 años, ¿qué le decimos a la afición de cara al centenario?

Le diría que hagan lo mismo que este año, que son el jugador número 12 y en todos los partidos han venido a animarnos, tanto si llueve como si hace sol, si vas ganando o si vas perdiendo y no se les puede pedir nada más. Sólo que sigan haciendo eso, porque nosotros les sentimos mucho desde dentro del campo y somos unos privilegiados.

¿Qué esperas darle al Rayo los próximos años, ahora que se despeja un poco la banda izquierda?

Ayudar a los compañeros. Me gusta ser un lateral muy ofensivo, aunque lo primero es defender. Quiero aportar muchísimas asistencias, ser muy profundo en ese carril y sobre todo dar muchísimas alegrías a la afición.

Empecemos por la alegría del domingo y disfrutar de un bonito viaje por Europa.

Sí, la verdad, sería un sueño.