Santi Comesaña no acabó el partido disputado ayer en el Nuevo Mirandilla de Cádiz debido a un golpe recibido en un lance con Rubén Sobrino. Corría el minuto 51 de encuentro cuando, en una disputa de balón, el centrocampista gallego del Rayo se lanzó al suelo para intentar recuperar la posesión, con tan mala fortuna que el jugador del Cádiz impactó con su bota en la zona derecha de la cara de Comesaña. El jugador fue atendido directamente sobre el terreno de juego y después se retiró a la banda, donde siguió con los cuidados del doctor Beceiro. Tras cambiarse de camiseta porque se había manchado de sangre, el jugador franjirrojo ingresó de nuevo en el terreno de juego pero, apenas unos minutos más tarde, tuvo que abandonar el partido al sentir ligeros mareos que, por precaución, obligaron a su sustitución.
Aun así, Comesaña permaneció en el banquillo junto a sus compañeros viendo el resto del encuentro y sin mayores problemas. Así lo explicó en sala de prensa el técnico Andoni Iraola: "Tenía una brecha en la oreja. Pensábamos que podría continuar pero tenía sensación de mareo y hemos decidido cambiarlo. Luego ha estado viendo el partido con el resto de compañeros, así que entiendo que no es nada importante".