¿Con las ocasiones de Pedro y sobre todo la de Alvaro vio opciones al final?
Era complejo pero lo hemos conseguido en alguna ocasión como el año pasado y uno se imagina el mismo escenario. La dificultad era mayor, fuera de casa y con el desgaste al que nos había sometido el Sevilla, pero les veo entrenar y realizamos esos entrenamientos exigentes que te hacen pensar que son capaces de llevar el partido hacia donde lo han llevado, siendo conscientes de que el Sevilla en cualquier acción puede penalizarte.
Al descanso, cuatro amarillas y una expulsión directa.
Conozco a los jugadores y si hay que felicitarles por algo es porque son tremendamente honrados y limpios. No voy a debatir aquí si han sido o no han sido, porque sinceramente ni me acuerdo de las acciones. La de Unai no sé si es justa o injusta, porque no me ha dado tiempo a verla, pero hoy en día sabes que si el árbitro para el partido y va a revisarla va a suceder lo que ha sucedido y su reacción indica que o es justa o está en el límite, porque si no cuando uno piensa que no ha hecho algo se rebela en mayor grado.
Qué le ha dicho a Unai tras la expulsión.
No he hablado con él. Cuando alguien comete un error él es el que más dolido está, porque sale del campo y perdemos, pero repito, no sé si ha sido justa o injusta.
Incluso con diez se pudo sacar algo.
Jugar aquí es precioso, a veces lo sufres, pero también sabes que si hay momentos en los que eres capaz de imponerte y dominar, la presión que esta afición le exige a sus jugadores puedes hacerla valer y utilizarla. Lo hemos intentado, pero no ha podido ser, hemos tenido poco o ningún acierto y debemos seguir.