La mala fortuna persigue al defensa central del Rayo Vallecano, Zé Castro. Tras superar su rotura fibrilar, y una vez completados varios entrenamientos a lo largo de esta semana, el portugués ha sufrido un golpe en la sesión de esta mañana -junto al mediapunta Fariña, que no ha sufrido males mayores- que le ha provocado un esguince en su tobillo derecho, quedando descartado definitivamente para el choque de mañana ante el Deportivo.
El que sí estará en principio es Llorente, que ha superado satisfactoriamente el esguince sufrido a mitad de semana y que hoy completó el entrenamiento matinal en el estadio sin mayores complicaciones.
Mañana el equipo realizará una breve sesión matinal en la ciudad deportiva para cerrar definitivamente la preparación del enfrentamiento ante el Dépor.