Roman Zozulya ha dejado de pertenecer al Rayo Vallecano apenas unas horas después de haber sido anunciado como el último fichaje del mercado de invierno de la entidad franjirroja. La presión de parte de la afición del club de Vallecas, que esta mañana acudió a la ciudad deportiva para dejar clara su postura, llevó a todas las partes (Betis, Rayo y jugador) a tomar la decisión del regreso del jugador ucraniano a Sevilla, lo que conllevará, según explicó hoy el director deportivo del Betis, que se quede sin equipo el resto de la temporada (ha pertenecido a Dnipro, Betis y por unas horas a Rayo Vallecano, cumpliendo el cupo máximo permitido de tres equipos en una misma temporada).
Pese a todo, el Rayo Vallecano, que anoche anunció la contratación del delantero ucraniano y que publicó una carta en la que el propio jugador se desmarcaba de cualquier relación con grupo paramilitar o fascista, aún no ha hecho pública la decisión de no contar con los servicios de Zozulya. Según parece, ambos clubes están trabajando para articular la mejor solución a un desaguisado que tuvo su momento cumbre esta mañana en la ciudad deportiva de Vallecas.
El jugador regresa a Sevilla y deberá olvidar su efímero paso por Vallecas.