La consecución del ascenso ante el C.D. Lugo el pasado domingo traerá consigo cambios en el Rayo Vallecano para el último partido del año. La vista al Nástic de Tarragona, que se jugará la permanencia ante los vallecanos, tendrá ausencias significativas a tenor de las palabras de Míchel en la rueda de prensa de esta mañana. El técnico, que ha vuelto a alabar el compromiso y la implicación de todos los integrantes de su plantilla, afirmó que tanto Alberto como Raúl de Tomás tienen problemas físicos, que llevan arrastrando las últimas semanas y que recomiendan reposo. Además, Chechu Dorado, pieza clave en la zaga rayista, "tiene que parar también", afirmó el técnico. De esta manera se abrirían las opciones para jugadores como Mario, Amaya, Manucho o Javi Guerra.
Estos cambios en la alineación del Rayo no implican, según Míchel, que el Rayo no vaya a pelear por la victoria. Ante el reto de ser campeón de liga por primera vez en la historia del club vallecano, Míchel comentaba que "ser campeones es algo histórico para el Rayo, seríamos los primeros en 94 años de historia y eso es algo que nos pone la piel de gallina", dijo.