Tres meses después de estar sufriendo continuas zancadillas, falta de respeto y hasta machismo y misoginia en el trato diario por parte de su propio club, el Rayo Vallecano Femenino dijo basta. Las futbolistas franjirrojas dieron una lección de dignidad plantándose en los primeros 20 segundos de partido y luchando contra un rival superior los otros 90 minutos.

Imposible plantar cara de mejor manera cuando están compitiendo prácticamente sin recursos (ni gimnasio, ni delegadx de equipo, ni delegadx de campo, ni médicx...) y con una plantilla corta y además mermada por las ausencias de varias jugadoras.

El Real Madrid Femenino fue el dueño y señor de los primeros 45 minutos. Jugó a placer. Moviendo la pelota sin oposición. Jugando muy bien entre líneas y buscando profundidad por las bandas. Pero al llegar al área se difuminó. Unas veces por desacierto de sus jugadoras. Otras por el acierto de una excepcional defensa rayista y de una inconmensurable Patricia Larqué.

Nahikari y Esther tuvieron las ocasiones más peligrosas de la primera mitad. Rondaron el 1-0 pero el remate forzado de la guipuzcoana se fue por milímetros y el de la granadina se estrelló contra los guantes de la guardameta franjirroja. El Rayo Femenino, por su parte, buscaba las contras pero le faltaba la precisión para generar peligro con unas Isadora y Millene muy aisladas

En el segundo acto las de Vallecas se encontraron espacio para correr y pillar la espalda a las defensas merengues. Y pese a ello el primer susto volvió a ser de Esther cuyo centro chut se fue a la madera. Las visitantes acusaron el golpe y poco después Nahikari dejaba sola a Esther dentro del área para que batiera a placer a Patricia Larqué en un desajuste defensivo claro de las rayistas.

Con 1-0 a favor las blancas se vinieron arriba y Moller estuvo a punto de hacer el segundo en un remate desde la frontal. Lo probó también Nahikari de chilena poco después y Moller de nuevo en un centro lateral cuando nos acercábamos al minuto 75. Por entonces ambos entrenadores habían introducido varios cambios para intentar refrescar a sus equipos de cara al tramo final.

El Rayo Femenino intentó estirarse pero sin acierto cuando se acercaba al área local. El Real Madrid Femenino estaba cómodo con la victoria y sus ataques se topaban con una descomunal Larqué. El orgullo del equipo vallecano estuvo a punto de rascar un punto en una pésima cesión a Misa cuyo control aprovechó Bulatovic para disparar pero en el último segundo la portera madridista sacaba la pierna izquierda evitando el gol. Se rozó la épica pero el equipo demostró la máxima dignidad tanto en la victoria los primeros 20 segundos, como en la derrota.