Opinión. El descenso del Rayo Vallecano B es un desastre. Lo siento mucho por los jóvenes jugadores franjirrojos que me consta que se lo han dejado todo en cada partido y lo siento por el puñado de aficionados que ha sido fiel a un equipo descabezado y que termina la temporada descendiendo a Preferente, la sexta categoría de nuestro fútbol, convirtiéndose de paso en el peor filial de todos los clubes que militan actualmente en Primera División.
Este descenso es un desastre porque si el salto de la tercera categoría (la actual Primera RFEF o la antigua Segunda B) es un auténtico abismo para llegar a Primera División, militar en la sexta categoría supone no tener cantera, ni más ni menos. Y un equipo sin cantera y un equipo como el Rayo sin cantera es lo más triste que puede haber.
Hubo una época no muy lejana en la que la cantera del Rayo era una de las mejores de la Comunidad de Madrid. Se codeaba en juveniles con los todopoderosos Real y Atlético de Madrid, militaba en Segunda División B o era equipo a batir en Tercera y tenía el nombre suficiente como para que todos estuvieran pendientes de lo que sucedía por Vallecas.
Ahora muy pocos aficionados del Rayo saben algo del filial, ahora a la mayoría de aficionados del Rayo no les suena ni un solo futbolista del Rayo B, ni les interesa. Quizá muchos de vosotros penséis que mientras tengamos dinero para fichar a RDT o a Falcao ¿para qué queremos tener cantera? Quizá sea eso lo que piense el presidente del club, bueno, quizá no, lo tengo claro. Yo en cambio creo en el romanticismo del fútbol de toda la vida, en ese fútbol capaz de hacer que chavales como Cota o Míchel hace años o como Coke o como Leo, Lass o Lucas o incluso como Mario Hernández o Morro pueden llegar a triunfar en su Rayo. Ahora me parece una locura que cualquier futbolista que juega en Preferente, repito, la sexta categoría de nuestro fútbol, pueda tener el nivel suficiente para despuntar y triunfar en Primera División. Sería un milagro. El descenso del Rayo Vallecano B me parece un auténtico desastre y los culpables del mismo deberían dar la cara y salir a pedir disculpas y a dar las explicaciones que tengo claro que nadie va a dar.