El 15 de julio de 2019 será recordado por la afición rayista como un nuevo día para la infamia provocado por la Junta Directiva del Rayo Vallecano en la figura de su presidente Raúl Martín Presa.

El máximo accionista del club hizo ayer su enésimo intento por aniquilar la sección femenina lanzando un órdago a la afición que será la que pague la apertura del estadio de Vallecas para que el Rayo Vallecano Femenino juegue en su casa.

Somos un club que defiende la igualdad entre hombres y mujeres. Y eso hay que hacerlo con derechos, pero también con deberes. Por eso hemos creado un abono exclusivo para el Rayo femenino". Con estas 33 palabras, Raúl Santiago Martín Presa intentaba tomarnos por tontos a todos.

El nuevo convenio de cesión del estadio obliga al Rayo a abrir el campo a sus jugadoras al menos en dos partidos esta temporada. Lo relevante de esta frase es la palabra OBLIGA. Cuando Presa te hable de derechos y deberes para con el Femenino recuerda que siempre se ha negado a abrir el estadio de Vallecas a la sección más laureada del club y que hizo lo posible y lo imposible para intentar quitar esos dos partidos del nuevo convenio. Esa es la verdadera igualdad entre hombres y mujeres que el Rayo defiende.

Lo que debería ser una fiesta del fútbol femenino en Vallecas y el sueño de futbolistas como Paula, Iris, Alicia o Sole se ha convertido en una venganza personal contra la afición del Rayo y contra las jugadoras. Será el rayismo, y no el club (como se refleja en el pago del canon anual del convenio) quien pague la apertura del estadio con los carnets exclusivos del Rayo Femenino. Pero no para que la sección femenina juegue allí 15 partidos de Liga. Solo jugarán 2. Las condiciones de los abonos lo dejan muy claro: para el equipo masculino el carnet da derecho a presenciar "los 21 partidos de Liga en el estadio de Vallecas"; para el equipo Femenino el carnet da derecho a presenciar los "partidos que juegue como local". Esa es la verdadera igualdad entre hombres y mujeres que el Rayo defiende.

La equiparación de derechos y deberes años atrás ha hecho que el Femenino viaje en autobús durante horas y que el Masculino lo haga en AVE o en avión. Idéntica situación se repite sobre los hoteles, las comidas, equipos y pruebas médicas... La igualdad de hombre y mujer que defiende Presa es la que hace que el Masculino esté haciendo un 'stage' en Austria y que el Femenino vaya a hacer toda la pretemporada en el campo 4 de la Ciudad Deportiva.

El cinismo de la equiparación de hombres y mujeres en el Rayo Vallecano tiene otros nombres y apellidos como Natalia Pablos o Irene Ferreras. A la primera quisieron obligarla a seguir jugando pese a que se quería retirar y tras 15 años en el club fue despedida con un comunicado de 3 líneas (ayer Marta Perarnau se despedía tras 11 años vistiendo la Franja sin un triste adiós por parte del club). A la segunda, según publicó Matagigantes, la 'animaron' a renunciar a que cobrara el último mes de contrato cuando supieron que no iba a renovar y se iba a otro club. Esa es la verdadera igualdad entre hombres y mujeres que el Rayo defiende.

Podríamos hablar del presupuesto del equipo masculino y del femenino la pasada temporada. Podríamos comparar la presencia de jugadores y jugadoras del Rayo en las presentaciones de las camisetas. Podríamos estar horas desmintiendo a un señor que nos quiere tomar por tontos.

En lugar de eso, le voy a dar mi opinión personal sobre su labor como presidente estos últimos 8 años: usted no está capacitado para dirigir ni al Escalerillas FC y mucho menos para hacerlo con un equipo campeón como el Rayo Vallecano Femenino.