Si había algún rayista que estaba esperando los primeros partidos de pretemporada para decidir si abonarse o no hacerlo en medio del boicot de la afición me temo que tras lo visto en el primer enfrentamiento en Austria aún va a tener más dudas.
Porque el Rayo de Paco Jémez está repitiendo los fallos de la pasada temporada. Si en Leganés ya se dejó remontar un 0-2 favorable, contra el Mainz 05 perdonó una infinidad de ocasiones arriba y concedió demasiadas facilidades atrás. La falta de acierto de cara al gol y los despistes defensivos marcaron tanto la primera parte como la segunda; tanto al equipo del primer tiempo (Dimi, Tito, Velázquez, León, Akieme, Amat, Pozo, Embarba, Ketu, Álvaro y Sergio Moreno, más Abdoulaye) como al del segundo (Alberto, Mario, Martin, Catena, Valentín, Carrasco, Comesaña, Kakutá, Joni, Bebé y Piovaccari, más Benito).
Las tuvo de todos los colores el Rayo en los primeros 45 minutos fallando lo imposible Álvaro solo frente al portero, Ketu y Sergio Moreno en un dos para uno, Akieme en un centro colgado que se envenenó pegando en el larguero... Los de Jémez eran superiores en el juego (bien Pozo, Moreno y Akieme) pero muy inferiores en las áreas. En la ajena como hemos visto y en la propia como demostró Quaison empujando a la red un rechace de Dimitrievski tras un cabezazo a la salida de un córner. Los fallos de marca y de zona fueron clamorosos.
Tampoco la suerte acompañaba cuando a los cinco minutos los de Vallecas perdían a Velázquez por una lesión que parece grave y que le impedía apoyar la pierna izquierda.
No hubo cambio de dinámica tras el descanso. El Rayo seguía fallando ocasiones de forma increíble (Kakutá envió hasta dos balones a las nubes, Sergio Benito remató al poste, Piovaccari la tuvo nada más debutar con la franja y Bebé fallo un penalti...) y regalando espacios a la espalda de la defensa. Matteta avisó fallando un mano a mano que sacó Alberto, pero en la segunda oportunidad no perdonó.
Se cerraba así un partido con pocas luces y muchas sombras del que habrá que aprender a morder en ambas áreas. Pero la verdadera realidad es que esta plantilla tendrá poco que ver con la que arranque la Liga 2019/2020.