González Fuentes fue el árbitro encargado de dirigir el partido entre el Real Madrid y el Rayo Vallecano. Iglesias Villanueva se encontraba al mando del VAR para ayudar a su compañero. Entre uno y otro "fabricaron" una explicación, tras la jugada del posible penalti de Camavinga sobre Oscar Valentín, que no convenció a los jugadores de la plantilla franjirroja.
El colegiado explicó a los jugadores del Rayo que el jugador del Real Madrid no impidió el disparo de Oscar Valentín, obviando que Camavinga llega tarde a su intención de despeje y golpea al jugador del Rayo en lugar de impactar con el balón. Según la explicación del árbitro se entiende que, con el apoyo de Iglesias Villanueva, tras el contacto de Oscar Valentín con el balón, lo que sucede después, que es la falta del jugador del Madrid sobre el rayista ya no es sancionable, en este caso, según su criterio, no hay penalti.
Los jugadores vallecanos intentaron explicarle a González Fuentes, sin éxito, que en cualquier caso, el madridista llega tarde, no toca balón y golpea al centrocampista vallecano, pero ya no había mucho más que hacer. La decisión estaba tomada.