Dijo Paco en la rueda de prensa que el fútbol a veces es "una mierda" y que si llega a ganar el Valencia se hubiera "ahorcado en el vestuario".

Sí, bueno, ese era el sentimiento que teníamos un poco todos cuando entramos, que se nos habían escapado dos puntos porque el equipo hizo méritos más que suficientes para haberse llevado el partido, sobre todo en la primera parte. Hasta el 1-1 el Valencia yo creo que no había chutado a puerta, el primero fue el de Negredo y lo hizo desde el medio del campo. Es la dinámica que llevamos, hacemos buenos partidos, jugamos muy bien al fútbol, hacemos méritos para sacar tres puntos, pero nos está costando y estamos pagando los pequeños errores que cometemos. Lo que dijimos nada más entrar, que lo hicimos con la cabeza baja, fue que teníamos que salir de Mestalla con la cabeza bien alta por el gran trabajo que hicimos y porque haciendo partidos como ese conseguiremos muchas victorias y sacaremos muchos puntos en esta segunda vuelta.

Tú conoces bien este estadio y sabes la presión que supone tener a esta afición tan exigente apretando desde la grada. Lo estabais llevando muy bien, hasta que llegó Negredo y marcó el gol que marcó.

Sí, es eso, creo que fue el primer disparo a puerta del Valencia, en el minuto 55 y desde el medio del campo. Cuando te enfrentas a un rival como el Valencia sabes que te puede pasar esto y que, aunque sea un equipo que no llega en su mejor momento y aunque hagas un buen partido, cualquier jugador de ellos te puede hacer un gol como ese. Aun así, el equipo se repuso e hizo el 1-2, pero no pudimos aguantar.

Hiciste una gran primera parte, en la segunda te costó más, pero tus primeros cuarenta y cinco minutos fueron espectaculares.

En la segunda parte nos costó más salir con el balón jugado. Sabíamos que ellos iban a apretar porque estaban perdiendo en casa y la gente estaba un poco en su contra y era lógico que se vinieran arriba y apretaran más. Contento por volver a Mestalla, un partido especial para mí y ahora toca seguir ayudando a mi equipo, el Rayo, para salir de ahí abajo.

Para lograr el objetivo se empieza con un empate ante el Valencia, que pese a todo lo vivido tampoco se puede dar por malo.

A priori un empate contra el Valencia se puede dar por bueno, aunque después de ver el partido y ver que nos pusimos dos veces por delante en el marcador, uno se va un poco con la sensación de que se nos escapó una grandísima ocasión para haber ganado en Valencia.

Ahora toca refrendarlo ante el Celta.

Estamos deseando que llegue ya el próximo partido.