Ayer se celebró la I Asamblea General de la Asociación de Accionistas ADRV en la que se trazaron las líneas maestras de la misma y en la que se debatieron los asuntos más importantes que atañen a la misma y al futuro más inmediato del Rayo Vallecano desde su perspectiva. En primer lugar, se aprobaron por unanimidad la elección de nuevo secretario y nuevo vocal, así como los cambios en la normativa de cierres de ejercicio a 31 de diciembre y la forma de proceder en caso de convocatorias de Asambleas urgentes con la suficiente motivación. A continuación, se propuso, y se aprobó, la entrada de la Asociación en la Federación de Accionistas y Socios del fútbol español (FASFE). En este sentido, el presidente de la asociación, Angel Barranco, comentó que "consideramos que es un valor añadido, contamos con su apoyo jurídico y valoramos su aportación a la consecución de una nueva Ley del Deporte".

Siguiendo con el orden del día, se aprobaron las cuentas a 31 de diciembre de 2017 con un resultado de 904,75 €, "que nos permite afrontar 2018 en positivo". Se presentó la memoria de actividades del año pasado con su campaña de micromecenazgo, acto de conciliación ante un juzgado, presentación ante las peñas, actuaciones en la Junta de Accionistas y la aceptación y comienzo de las diligencias de la querella penal del próximo jueves contra Raúl Martín Presa, presidente del Rayo Vallecano, por su actuación en el traspaso de 9,2 millones entre el club y la Fundación, así como por su inversión en Oklahoma.

Para cerrar, la Asamblea dio paso al turno de ruegos y preguntas en el que se trataron diversos temas de interés para los afiliados.