Si Paco Jémez se caracteriza por algo es por la intensidad que espera de sus jugadores desde el primer al último minuto de cada entrenamiento. En la jornada vespertina de hoy pudimos ver al técnico en una de esas facetas que pocas veces pasan desapercibidas en Vallecas. Los momentos de 'alto voltaje' fueron evidentes en un par de situaciones del entrenamiento en el que el técnico tuvo que levantar su voz, parar la actividad y explicar lo que esperaba de los suyos.
No se ejercitaron todos los integrantes de la primera plantilla
Entre los ausentes más destacados se encontraban Tito, Bebé o Abdoulaye. Tampoco pudimos ver a Adrián Carrasco con el resto de compañeros, mientras que Mario Hernández sufrió un fuerte golpe en un hombro durante una de las acciones del entrenamiento y Mario Suárez 'disparó las alarmas' al evidenciar molestias en uno de sus tobillos. El centrocampista estuvo charlando con el doctor Beceiro sobre el césped del campo 5 de la ciudad deportiva e intercambió algunas palabras con los fisios del equipo. El medio centro estiró junto al resto y finalizó la sesión.