Raúl Tamudo se ganó con todos los honores inscribir su nombre en los libros dorados de la historia del Rayo Vallecano. Hace ocho años, el 13 de mayo de 2012, el delantero catalán provocó uno de los momentos más memorables que se recuerdan en el barrio de Vallecas. Era el último partido de liga, el Rayo se enfrentaba al Granada y necesitaba ganar para conseguir mantenerse en Primera División. Los andaluces se salvaban con un empate, o incluso con una derrota si el Villarreal perdía ante el At. Madrid. Los colchoneros lograron en los instantes finales de su partido la victoria en el Madrigal y en Vallecas se obró el milagro en la última jugada de un partido que parecía llevar al Rayo a Segunda. Tras un saque de esquina y un posterior centro lateral, un remate al larguero de Michu y el cabezazo de Tamudo en boca de gol y en fuera de juego no señalado, sirvió para que el Rayo lograse la salvación y así jugar un año más en Primera División. El Granada, de rebote, también se salvaba y descendía el Villarreal.
Ocho años se cumplen hoy de aquella gesta del Rayo dirigido por José Ramón Sandoval. Aquel partido lo jugaron: Cobeño, Tito, Arribas (Tamudo), Labaka, Casado, Michu, Javi Fuego, Armenteros (Lass), Movilla (Trashorras), Diego Costa y Piti.