El segundo test de pretemporada del Rayo Vallecano acabó en empate en Charleroi (Bruselas, Bélgica). Pero no mereció ese resultado el conjunto de Francisco, ni mucho menos, que fue claramente superior durante muchos tramos del encuentro a un rival que aprovechó un penalti cometido por Aridane para lograr la igualada desde los 11 metros.

El objetivo de estos partidos sigue siendo que los jugadores vayan cogiendo ritmo de competición de cara a un estreno liguero que se producirá dentro de apenas 3 semanas. Y la misión del técnico franjirrojo era ir introduciendo nuevas caras a su idea del equipo pero manteniendo el estilo. Algo que logró durante amplios tramos del encuentro donde los de Vallecas pudieron llevarse la victoria.

El Rayo saltó al césped con ganas de resolver el amistoso por la vía rápida. Dimitrievski se enfundaba los guantes con una línea defensiva casi totalmente inédita para él con respecto a otros años y donde sólo sobrevivía Balliu. Martín estrenaba titularidad así como el Pacha Espino. Por delante un doble pivote con Óscar Valentín y Unai, con Álvaro y Salvi acostados a bandas y Trejo y Falcao intentando contactar en punta.

A los 5 minutos los franjirrojos ya estaban en ventaja gracias al tanto de Álvaro García que suma 2 esta pretemporada y sigue llamando a las puertas de la selección absoluta siendo un protagonista fundamental en el Rayo de Francisco. El dominio vallecano era total hasta que a la media hora del partido Aridane cometía un penalti que permitió a los belgas igualar el marcador tras un choque en un saque de esquina. Ilaharamitra fue el mejor del Royal Charleroi Sporting Club pudiendo haber empatado antes de lograr su tanto desde los 11 metros.

Tras el paso por vestuarios llegó el baile de cambios en locales y visitantes. Francisco ponía en escena a Joni Montiel, Bebé, Ciss (todos ellos recién llegados esta semana a Bélgica) además de a Chavarría, Pozo, Isi, Mumin, Jorge Moreno, Nteka... Mereció ponerse por delante el Rayo con ocasiones clarísimas de Balliu de cabeza que se fue rozando el palo y un mano a mano de Nteka con Koffi que desbarató el guardameta. Los locales acusaban las importantes bajas de algunos de sus grandes futbolistas: Bernier, Badji, Marcq y Dabbagh.

Ante un equipo mucho más rodado, los franjirrojos demostraron una gran personalidad dejando perlas de muy buen fútbol. Pese a los muchísimos cambios que vivió el equipo después de su partido en Atenas, los de Francisco siguen perfilando un estilo que esperamos siga creciendo con el paso de los encuentros. El Rayo quiere el balón, no lo importa dominar a sus rivales y sigue sorprendiendo con mucha velocidad por bandas con jugadores que están en un estado de forma inmejorable.

Llegarán nuevas caras hasta que empiece la Liga pero el estilo ya está ahí.