Diego Pablo Simeone compareció en el estadio de Vallecas con su habitual gesto serio pero la felicidad iba por dentro. Su equipo le había endosado un 0-7 a un Rayo Vallecano invicto e imbatido. Una goleada sin paliativos y que escuece en la familia franjirroja.
Sin embargo, el entrenador argentino dejó claro que no había hecho el análisis del encuentro desde la perspectiva de haber logrado la mayor goleada de la historia del Atlético fuera de casa.
"No sabíamos que era la mayor goleada de la historia del Atlético de Madrid fuera de casa. Siempre respetamos al rival y desde esa lectura no la hicimos. Estamos contentos por el partido que hicimos" explicó en la única pregunta en la que se refirió levemente al rival.