El delantero del Málaga C.F., Nordin Amrabat, fue protagonista en el choque que su equipo ganó en Vallecas ante el Rayo y lo fue por partida doble. Por un lado, por su constante pelea con los centrales y laterales del conjunto vallecano, y por otro, por los gestos que realizó a un sector de la grada del Estadio de Vallecas, en respuesta a los aficionados del graderío bajo de la Avenida de la Albufera.
En la primera mitad, Amrabat se las vio en muchas acciones con Diego Llorente, perdiendo en casi todos los duelos con el jugador franjirrojo. En el segundo período tuvo que vérselas con Antonio Amaya primero (en la imagen inferior el central muestra al asistente las 'marcas de guerra' fruto de su pelea con el delantero), con Nacho después y, por último, con Tito. Entre tanto, el jugador holandés, internacional con Marruecos por su ascendencia marroquí, tuvo varios momentos de 'tensión' con la grada vallecana a la que brindó ciertos gestos y lanzó besos en respuesta a los aficionados que protestaron ante sus acciones de ataque frente a los defensores locales.