En un balón alto peleado por Abdoulaye Ba y Grippo, defensas de Rayo y Zaragoza respectivamente, un encontronazo entre las cabezas de ambos jugadores provocó el susto de la tarde en el Estadio de Vallecas. La caída de ambos, semi-inconscientes, provocó que las asistencias de ambos equipos saltaran rápidamente a atenderles por la posible gravedad de la jugada. Ambos jugadores mostraron evidentes síntomas de mareo y desorientación y tardaron unos minutos en recuperarse. El peor parado sería el defensor zaragocista que, tras reincorporarse al juego, pidió el cambio al sufrir nuevos mareos que le obligaron a ser trasladado a la Clínica Fremap de Majadahonda donde ha pasado la noche en observación, por lo que no pudo regresar con el resto de la expedición aragonesa a Zaragoza. Abdoulaye por su parte pudo continuar el resto del partido y ya no mostró más síntomas de resentirse de una acción aparatosa y que felizmente se quedó tan solo en un susto.