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El Rayo sigue en estado de gracia

Escrito por Sábado, 21 Marzo 2015

    El Rayo Vallecano sigue en estado de gracia. Los de Jémez, que derrotaron a un Málaga al que apenas dejaron respirar (1-0, gol de Kakuta), siguen con su excepcional racha como local.



    Ficha técnica:

    R. Vallecano (1): Cristian Alvarez, Tito, Zé Castro, Nacho (Insua, minuto 53), Amaya, Baena (A), Trashorras, Kakuta (Licá, minuto 69), Embarba, Bueno y Leo (Manucho, minuto 35).

    Málaga (0): Kameni, Weligton, Samuel, Horta (Amrabat, minuto 55), Juanmi, Recio, Angeleri, Rosales, Torres (Boka, minuto 55), Samu Castillejo (Duda, minuto 78 y Darder.

    Arbitro: Jaime Latre.

    Goles: 1-0. Minuto 21. Kakuta.


    El Rayo Vallecano sigue en su burbuja particular y, tras derrotar al Málaga, propone nuevas alternativas a la clasificación final de la liga. Los de Jémez, que disputaron un partido muy intenso, supieron aprovechar el tanto de Kakuta en la primera mitad para llevarse tres puntos muy valiosos en su lucha por asegurar la permanencia y soñar con objetivos para los que, en un principio, no estaban invitados.

    El choque de hoy, con la novedad de Embarba por Licá y Tito por Quini, nos ofreció la cara más 'guerrillera' del equipo vallecano. El Málaga, que quería dejar atrás a un posible rival por puestos europeos -pese a la notable diferencia de puntos entre unos y otros-, fue un equipo plano y sin apenas ideas, totalmente bloqueado por la asfixiante presión de los franjirrojos. El centro del campo malaguista apenas existía y los desplazamientos en largo de la línea defensiva no generaban peligro en las inmediaciones del área de un Cristian Alvarez que estuvo a muy buen nivel.

    Pese al control del Rayo la primera gran ocasión del partido sería para los de Javi Gracia. El delantero andaluz, Samu Castillejo, remató con potencia ante la salida del cancerbero argentino, que despejó con el pecho el primer acercamiento de los visitantes. Tito rozó el gol vallecano, mientras que el francés Gael Kakuta se encargó de ejecutar de cabeza a un Kameni que se había mostrado bastante impreciso con los inicios de jugada de su equipo y que nada pudo hacer ante el remate del jugador franjirrojo.

    Según avanzaban los minutos el Rayo se iba afianzando. La línea defensiva trabajaba con solvencia ante las tímidas llegadas de un Málaga inoperante en ataque, Trashorras y un incansable Baena eran dueños del centro del campo, mientras Leo aprovechaba con su velocidad las buenas acciones de Embarba y Kakuta por cada costado. Bueno, con menos espacios y opciones que en jornadas anteriores, no pudo refrendar su espectacular estado de forma.

    Antes del descanso, unas molestias del hispano-brasileño Leo obligaban a Jémez a dar entrada a Manucho para evitar males mayores a un jugador que una semana más se quedó 'sin mojar'.

    El Málaga apretó, Jaime Latre tarjeteó a diestro y siniestro y el Rayo supo sufrir para sumar tres puntos

    La segunda mitad tenía que cambiar y lo hizo desde el pitido inicial. El Málaga dio un paso adelante, buscó mayor protagonismo en el partido y apretó con mayor insistencia al equipo de Jémez, que confiaba en la pelea de Manucho y en alguno de los arranques de rabia de su equipo para finiquitar el choque. A la fiesta se quiso sumar el colegiado, Jaime Latre, que inició su particular recital de amonestaciones. Siete tarjetas para los rayistas y una para los malagueños, que supuso la expulsión de Angeleri, fue el bagaje final de un segundo período con un ritmo desigual y que terminó encendiendo a la grada de Vallecas (totalmente apagada en su inicio por la huelga de animación de Bukaneros).

    Un gran disparo de Alberto Bueno, despejado a córner por Kameni, sería la mejor ocasión de un segundo período en el que Manucho gozó de un par de oportunidades para haber finiquitado un encuentro que vivió la contundencia de Weligton en defensa y que mostró el estado de gracia en el que se encuentra un equipo que, además de jugar bien al fútbol, es solidario, trabajador y constante. El Rayo sigue soñando.

     

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