Celta de Vigo y Rayo Vallecano protagonizarán este sábado uno de los duelos, a priori, más igualados en cuanto a intención de juego, a gusto por la posesión, a presión y recuperación y a filosofía. Ambos conjuntos han mantenido el bloque principal del año pasado, han dado continuidad a sus proyectos desde el banquillo y están intentando crecer desde la base de la estabilidad y el crecimiento. 

El Celta es un equipo muy apoyado en la visión de su entrenador, Berizzo, que ha dado al equipo una personalidad y una imagen totalmente reconocible. Pese a haber perdido a jugadores importantes como el centrocampista danés Krohn-Dehli (Sevilla) o los delanteros Larrivey (Baniyas), Santi Mina (Valencia) y Charles (Málaga), se hicieron con los servicios de Iago Aspas, que regresa a casa tras su paso por la liga inglesa y por el Sevilla, donde no vivió sus mejores momentos.

Los porteros, Sergio y Rubén, y el bloque defensivo no han sufrido retoques, con hombres como Mallo, Fontás, Cabral o Jonny, algo que se repite en la zona medular, donde destaca la incorporación del danés Wass, ex-jugador del Benfica, que ha llegado esta temporada para reforzar un centro del campo en el que siguen los Pablo Hernández, Orellana, Radoja o Augusto.

Es en ataque donde el equipo de Berizzo ha sufrido más movimientos y, pese a mantener a Nolito -que parece contar con el interés de varios equipos-, las salidas de los mencionados Larrivey, Charles y Santi Mina ha obligado a los celestes a moverse en el mercado para fichar al serbio Drazic procedente del OFK Belgrado y al sueco Guidetti que, pese a su juventud (23), ya ha jugado en el Manchester City, Feyenoord, Stoke City o Celtic de Glasgow, entre otros, siempre en calidad de cedido por el City, donde no pudo triunfar. El belga Bongonda y el reencuentro con Iago Aspas, suponen los últimos retoques a una plantilla que buscará ante el Rayo reeditar la gran actuación que, liderada por Santi Mina con cuatro goles, ofrecieron la temporada pasada. 

El inicio liguero de los celestes fue positivo en el marcador (victoria ante el Levante por 1-2), aunque dejó muchas dudas en otros aspectos. La imagen del equipo, pese al alto nivel de posesión de balón (en torno al 70%), no fue la mejor y la lesión del portero Rubén dejó un sabor agridulce en una victoria que les sirvió para colocarse entre los primeros de la tabla tras la primera jornada.

En el resto de aspectos, el conjunto pontevedrés no ha ofrecido cifra oficial de socios para esta temporada y mantiene una zona de su estadio en obras, lo que restará algo de ambiente a un choque que promete espectáculo.

Jémez repite convocatoria y sigue sin contar con Cissé o Chengdong, entre otros

Las bajas confirmadas de Embarba y Cobeño por lesión, se sumaron a los descartes de aquellos jugadores que no están teniendo sitio en el equipo actualmente, caso de Cissé o Chengdong. La ausencia de Cobeño fue cubierta por Juan Carlos y por la presencia del portero del filial, Alberto -Jémez quiere tres porteros en las convocatorias de visitante-, en una lista de veinte jugadores por las molestias físicas del lateral derecho, Tito, que esperará hasta los instantes previos al inicio del partido para decidir si está o no en condiciones de jugar el partido. De no hacerlo, será Quini, su recambio natural, el que acompañe a Zé Castro, Llorente y, previsiblemente a Nacho, que ofreció una buena imagen en el debut liguero ante el Valencia de la semana pasada.

Para la medular, Jémez podría mantener el bloque formado por Trashorras y Baena en el centro y Bebé y Ebert en las bandas, dejando las incógnitas más importantes para la zona de ataque. Fariña no está para disputar noventa minutos al máximo nivel, pero el técnico vallecano no quiere muchos experimentos con jugadores fuera de su posición natural, como ocurriera con Miku ante el Valencia, lo que nos ofrecería un escenario en el que el argentino podría ser titular mañana hasta que el cuerpo aguante.

El conjunto vallecano, todavía pendiente de los últimos movimientos del mercado para la incorporación de al menos dos jugadores que mejoren el nivel existente, llega al duelo con el Celta con la idea de resarcirse de la goleada del año pasado, pero sobre todo con la intención de ir poco a poco encontrando la solución a la fórmula futbolística que cada año plantea la estrategia de un equipo diseñado para salvar la categoría.

Después, un parón para seguir cargando las piernas de trabajo, y el duelo ante el Deportivo de la Coruña a mediados del mes de septiembre y con un histórico de la franja, Miguel Albiol, como gran protagonista.