El Rayo Vallecano - Mallorca dejó en el rayismo la sensación de haber desaprovechado una tremenda oportunidad de acercarse al ascenso directo y haberse distanciado de los perseguidores viendo los demás resultados de la jornada. 20 minutos de locura dejaron sentenciado al partido en el que los franjirrojos se vieron arrollados por los baleares.

Los de Luis García Plaza tenían clara una alta presión en salida de balón en un césped maltratado por la nieve y la lluvia. Trejo, Mario Suárez, Isi y cualquier jugador que recibiera de espaldas un balón jugado desde la defensa era inmediatamente presionado por uno o dos futbolistas rivales.

El estado del terreno de juego imposibilitaba hacer un control orientado de primeras por lo que las recuperaciones y robos combinado con la verticalidad del Mallorca y su efectividad sentenciaron el partido. Un partido ganado en la pizarra en poco más de un cuarto de hora.

Andoni Iraola, que normalmente apuesta por un fútbol más vertical, se equivocó buscando salidas combinativas desde atrás. Su opción de fútbol directo, con diagonales y balones a la espalda de los laterales, hubiera sido más factible dado cómo estaba el césped de Vallecas. Pero no quería renunciar al balón rifándolo en largo ante un Mallorca dominante. Pero no salió como esperábamos...