En la historia del Rayo hay muchos personajes que han marcado una época. Uno de ellos fue Manuel Peñalva. Manuel Peñalva fue jugador, entrenador, director técnico, director de cantera... Vecino de Vallecas vivía junto al estadio, dejó un legado muy importante siendo uno de los jugadores que ascendieron a segunda división.
Pasión por el Rayo: Tengo el gusto de saludar a su hijo Manuel Peñalva. Buenas noches
Manuel Peñalva (hijo): Hola, buenas noches.
Bienvenido al programa del centenario en Pasión por el Rayo Radio de En Clave de Franja. Vamos a hablar de alguien tan importante y querido, también olvidado por el club, que es la figura de tu padre una figura importantísima en la historia del Rayo.
Gracias por acordaros de la figura de mi padre en los años 50. Tuvo mucha importancia en la historia del Rayo en un tramo difícil reconocido por los historiadores. Ellos lograron el primer ascenso a segunda división que es el hito más nombrado en estos primeros años y que se va recordando. Según pasa el tiempo como que se idealiza más por esa falta de repercusión a nivel club. Hoy es el Rayo Vallecano como club, pero tiene poco de rayistas. A nivel deportivo lo hacen bien y podrán tener muchos éxitos pero no se cuenta con el pasado.
Tú has hablado mucho con tu padre y te habrá contado muchas historias que me gustaría recuperar. ¿Qué recuerdo especial tienes que te dijera tu padre
Cuando subieron a segunda división lo vivieron en una época en la que no es como ahora. Las Ligas eran más cortas de 12 o 14 equipos. Eran ligas reducidas y luego había una promoción con varias eliminatorias que la última fue contra el equipo de Tarragona. Allí jugaron y tuvieron un resultado de 2-1 y luego no en Vallecas sino en el antiguo Metropolitano, hablaba mucho de la gradona del Metropolitano antiguo, él decía que habían llenado el estadio con 20 o 30.000 personas. Yo no recuerdo en aquellos tiempos cuantos cabían y que le ganaron 5-2 al Tarragona. Les hicieron un recibimiento en la Junta Municipal de Vallecas donde llegaron como auténticos héroes con coches descapotables y rodeados de público. Yo he visto alguna foto en periódicos muy antiguos con esa panorámica que él relataba. Eso me lo contaba mucho. Luego fueron a la iglesia de San Ramón en Puente de Vallecas a ofrecer el ascenso. Lo contaba muchas veces en casa y fuera porque cuando eramos pequeños al ir por la calle la gente se acordaba de sus partidos, de sus goles y situaciones y le paraban. Bajábamos a dar un paseo y con el paso del tiempo te das cuenta de que paraban a tu padre y comentaban cosas que habían vivido de partidos.
¿Cómo lo vivías siendo un niño?
Entonces era como, otra vez, la misma historia. Era todo muy familiar. Hablaba con mucha gente que había vivido en Vallecas que le recordaban de haberle visto jugar, de partidos... Todo se queda ahí pero cuando se hace más mayor y empiezan a caer el 90º aniversario o algún evento de alguna peña empezó a coger una nueva dimensión.
Cuando yo hablaba con él me recordaba cómo eran los viajes, cómo vivían los futbolistas, cómo era el balón y como ha cambiado el fútbol. Eran horas y horas para llegar a un partido. Eran historias de un fútbol muy distinto al actual.
Eso lo contaba mucho del típico viaje a Extremadura, de salir y viajar de noche y volver a las 5 o las 6 de la mañana e irte a trabajar. Hoy en día las distancias no tienen nada que ver y con mucha más comodidad. Antes iban en tren e imagino que irían parando por todos los pueblos. Ha cambiado mucho también las equipaciones. Las fotos que yo he visto en la mayoría de ellas ninguna lleva el escudo. Las primeras ni siquiera tenían la franja. En las medias se veían como rayas rojiblancas pero no lo podías saber porque eran en blanco y negro. Pero siempre se veía que el campo y el estadio estaba lleno. Daba igual contra quien jugara que Vallecas se llenaba. Todo el mundo se apuntaba y quería estar. Había niños en el césped y menos control que ahora. El público casi se metía en el campo. Se puede ver en algunas fotos.
Hay muchas imágenes espectaculares de Vallecas a reventar y gente colocándose donde podían...
Estos días hablando con Rafa Garrido, el socio número 1, me decía que veía los partidos de gratis porque había zonas desde donde se veía y veías a gente encaramada a sitios insospechados. La gente hacía lo que podía.
El partido de vuelta se jugaría en el Estadio Metropolitano el 1 de julio de 1956 con el resultado de 5 a 2 favorable al equipo vallecano pic.twitter.com/2k12u6xO7C
— Manuel Peñalva (@manuel_penalva) June 29, 2020
¿Tenía tu padre muchos recuerdos físicos de aquella época de su etapa como futbolista?
No tanto porque entonces no se regalaban las camisetas como ahora y no había tanta producción. Si la camiseta se rompía en cualquier agarrón, había que remendarla. De haber tenido una camiseta que hoy en día tendría un gran valor para un museo, no tenemos. Si que llegué a tener un balón que se engrasaba con grasa de caballo. Ese balón pesaba muchísimo y yo lo acabé destrozando de tanto usarlo. Era lo que nos había quedado de esa época. Yo creo que en aquella época no creo ni que fueran con un chándal. No tenemos nada guardado. Sí tenemos de la selección española cuando fue con lo que sería una sub21 ahora. Fue a los Juegos Mediterráneos que se disputaron en Barcelona y sí lo tenemos guardado. Sería una buena pieza de museo.
Sin duda de un museo de rayistas que no tenemos por desgracia.
Fue en el año 55 que no creo que hubiera más internacionales del Rayo. Pero no lo recuerdo porque en la historia no me da para tanto.
Hablamos del Manuel Peñalva futbolista pero pasó el tiempo y siguió vinculado al Rayo Vallecano. Yo no sé si le faltó hacer algo del club porque hizo de todo.
Se retiró pronto porque entonces los futbolistas no llegaban hasta los 35-36, o incluso más, como ahora. Él se retiró con 28 años. Hoy sería impensable salvo que tuvieras una lesión grave. Sacó los dos niveles de entrenador y estuvo entrenando el equipo de juveniles del Rayo o de aficionados del que hablaba mucho con Felines o Lorenzo Benito, creo... Me pasa que ya me empieza a fallar la memoria. Hablaba mucho de aquel equipo de Potele que llegó a una final. Tuvo una fase de entrenador que no estuvo en el Rayo y sí en el Moscardó, el Plus Ultra, que son filiales de Atlético y Real Madrid. Estuvo en la selección juvenil entrenando, y también con la selección universitaria que estuvo algún jugador del Rayo y estuvieron jugando en Rumanía representando a España y fue como seleccionador. Volvió al Rayo e hizo de todo: entrenador, coordinador de categorías inferiores, secretario técnico del primer equipo. Era una época en la que viajábamos el fin de semana a ver a los rivales del Rayo (Salamanca, Zaragoza...) para visionar a los rivales para tener un informe para los entrenadores.
Como los analistas de hoy en día que hacen vídeos y tienes informes de cada minuto, antes se hacía yendo a ver a los rivales
Eso es, cogíamos el coche el fin de semana y pasábamos viendo el partido en Gijón, o alguna otra ciudad española. Iba yo con él, o con mi tío que también estuvo ligado al Rayo. Esa fue su vida después de jugador. Fue delegado del primer equipo y se dedicó mucho a la cantera. Era casi como su misión preferida.
Justo te lo iba a decir. Estaba muy pendiente de los niños. Un día hablando con mi hijo recuerdo que le decía que tenía que controlar con los dos pies con mucho cariño.
Estuvo mucho tiempo dedicado a ello a partir de los 70 que fue en la época en la que entra a trabajar en el Rayo Magdalena como secretaria, Juan Pedro Navarro con quien tenía muy buena relación más que a nivel profesional. Trabajó con Potele, Benito que pasaron por cantera como entrenadores o coordinadores. Siempre estuvo en la defensa de la cantera y de los fichajes. Yo recuerdo el fichaje de Sabas o Miguel Hernández que llegaron al primer equipo. Tenía relación de ir a verles como ojeador y terminar fichándolos el Rayo.
La vida en la familia de Manuel Peñalva estuvo muy vinculada a Vallecas. Siempre estuvo con el barrio en la cabeza y en el corazón.
Tener el estadio tan cerca hizo que antes fuéramos socios toda la familia. Desde los 50 teníamos carnets de mi padre, mis tíos, mi madre, mi hermana... Hoy en día mis sobrinos, mi hermana y demás tenemos 8-10 abonos en la misma zona donde estaba él en la parte izquierda de Arroyo del Olivar. Tuvo su propia peña cuando fue futbolista y cuando no lo fue participó en ellas como en la Peña Siglo XXI. En los bares cercanos al estadio le reconocían y de hecho muchos de ellos guardan fotos suyas. Tenía mucha relación con el barrio.
Queríamos recordar la figura importantísima de tu padre. Arranca el centenario del Rayo que es una fecha bonita e importante y la afición del Rayo antes de que se celebrara el centenario dio buena muestra de lo que quieren hacer. Te agradezco que hayas estado esta noche con nosotros y dejo el micrófono abierto para que digas lo que quieras del Rayo a la gente que le conoció y a la que no para que se unan a que le queremos recordar.
Se ha perdido una magia entre la afición y el club. Antes el club era mucho más accesible y estaba al alcance de todos, tradicionalmente. Se ha perdido a día de hoy y hoy no tiene nada que ver con los aficionados y estamos en dos líneas paralelas. Es lo que se lleva ahora en los clubs pero aquí se nota más por diferencia de lo que se vivió en el pasado. Si ha de ser así que sea así pero que la gente no pierda la ilusión y la armonía por seguir disfrutando de esa unión que se transmite de unos a otros. Eso no se ha perdido y contra eso no se puede combatir. Habría que pedir a la actual dirección del equipo que la cantera estuviera más cuidada, que el equipo femenino tuviera su espacio y pudieran seguir brillando no hace tanto tiempo. Eso es lo que más echamos en falta que haya una comunión con todos los estamentos del club. La cantera que ha sido brillante y ejemplar se va deteriorando. Lo echamos en falta los de mi generación que quizá los nuevos rayistas no lo sean tanto.
Muchas gracias y te agradezco que hayas podido charlar con nosotros para recordar la figura importantísima de Manuel Peñalva.
Muchas gracias a vosotros por intentar seguir haciendo algo de rayismo.