¿Ha podido influir en la derrota el nuevo sistema táctico del equipo con una línea defensiva de tres jugadores?

No nos han hecho ocasiones de gol. En la primera parte era más bien mantenerte de pie, el terreno de juego no estaba muy bien, y ha sido un partido disputado con veinticinco minutos para nosotros y veinte para ellos. Luego, en la segunda parte, ha sido un partido muy atropellado porque nadie se quedaba con el balón. Hemos tenido la de Manucho y las dos intervenciones dentro del área que no nos han pitado y nada más. En el último segundo te meten este gol y jarro de agua fría.

¿Siente el respaldo del club?

Acaba de terminar el partido.

El equipo estaba tirando para adelante con los resultados de casa, ¿cómo te deja y al vestuario esta derrota?

Estamos muy jodidos. Creo que el partido no estaba ni para uno ni para otro, era un empate porque ninguno de los dos hemos estado bien. En el último tramo de cada campo no hacíamos buenas intervenciones con el balón, no nos asociábamos bien ahí. Hemos tenido momentos buenos con Mojica entrando, aunque los centros no han sido buenos al no encontrar rematador. El partido estaba así, esto es fútbol, y en el minuto 94 ha salido un pepinazo, te lo meten por la escuadra y asimilando, a reconocer la derrota y nada más.

Hablabas ayer de reválidas, ¿entenderías que el club tomara una decisión sobre tu futuro después de esta derrota?

Todos en la vida tenemos unas reválidas diferentes. La mía la tengo desde el minuto uno y para algunos desde el minuto dos. Las reválidas hay que intentar salvarlas con el equipo, con mi gente y con mi afición.

El equipo tenía el balón y las ocasiones, pero no finalizaba las jugadas, ¿crees que no les salían las cosas a los jugadores o hay algo más?

En la primera parte hemos hecho mucho desgaste físico, los controles no se podían hacer bien porque el terreno de juego estaba horroroso y cuando llegábamos al área han sido decisiones de último pase o último golpeo, pero ellos han tirado una vez a portería en la segunda parte y ha sido gol. La efectividad es la que marca en el mundo del fútbol. Nosotros hemos tenido dos o tres acercamientos en la segunda parte y no los hemos materializado. Si hubiésemos abierto el marcador, todo habría sido diferente. El fútbol son estados de ánimo y esta vez no estuvo a nuestro favor. Es el primer partido que perdemos en casa y hay que asimilarlo, porque no hemos estado todo lo bien que queríamos.

Hoy has probado con el 3-5-2, ¿te ha convencido el esquema del equipo?

Ha sido por necesidad, porque no teníamos centrales. Tenemos dos lesionados y otro con tarjetas, así que había que acoplar el sistema, porque creíamos que les podíamos hacer daño por las bandas como ha sido en los primeros veinticinco minutos. Viendo el tribote que teníamos arriba, con Manucho, Javi Guerra y Ebert, creíamos que con buenos centros laterales íbamos a tener ocasiones. No ha sido así, pero tampoco ellos han hecho nada. Hemos defendido bien y solo han salido dos contras en la primera parte. Era cuestión de tener más claridad en esos centros laterales, porque teníamos jugadores para rematar, pero ha sido más bien por adaptarte a los jugadores que tienes.

¿Cree que la actuación arbitral ha condicionado al equipo?

No ha ayudado mucho, pero en el tema arbitral solo puedo decir que bastante tienen ellos con acertar o no acertar. Si yo ahora cogiera como referencia el árbitro para justificar la derrota, me estaría equivocando. Cada uno tiene su trabajo y todos queremos hacerlo lo mejor posible. La culpa es nuestra y no de nadie más.

Ebert se ha ido andando y la afición le ha pitado, ¿cómo ves eso como entrenador?

Ebert tiene esos momentos. En el túnel de vestuarios me ha dicho que sobre el minuto 80 ya no aguantaría más y hemos estado aguantando. Como era un querer y no poder y no llegaba, le hemos cambiado. El jugador se tiene que meter en el papel de que necesitábamos ganar y había que salir corriendo, pero Patrick es así para lo bueno y para lo malo. Muchas veces todos nos equivocamos y nada más.