El Rayo Vallecano y su cantera. Defensores y detractores. La historia de nunca acabar Episodio 'nosecuantos' temporada 2020/2021. ¿Otra vez estamos dando la lata con los canteranos? Pues sí, querido lector, otra vez estamos dando la lata con los canteranos. Porque igual que se les despelleja al mínimo fallo que cometen, es de justicia reclamar su figura cuando los errores los cometen otros.

Aquí no hay nadie perfecto. Ni nosotros mismos, desde luego. Pero tampoco Iraola. Ni antes Jémez. Ni antes Michel. Entrenadores que no dieron demasiadas oportunidades a la cantera pese a 'presumir' de hacer entrenar o debutar a algunos. Pagaron los errores propios de gente joven a un precio al que no se les ha cobrado a otros como Advíncula, Saveljich, Dimitrievski, Zidane, Embarba o cualquier otro futbolista de los últimos años.

Con la falta de gol del equipo no se ha mirado por el debut de Marc Echarri, por ejemplo. Pero entiendo a Iraola que pidió un delantero y le ficharon a Guerrero. Si la apuesta del club es Guerrero, Guerrero es el que va a jugar.

El equipo franjirrojo ha pasado de tener problemas para alinear jugadores con ficha del filial a no contar con ellos. 

Mario Hernández fue indiscutible durante las primeras 13 jornadas e hizo un mes de enero casi inmejorable. ¿Por qué ya no juega? Su positivo por covid le dejó fuera entre noviembre y diciembre por lo que si fuera eso no hubiera jugado en enero. Con 14 partidos a sus espaldas y solo una tarjeta amarilla, la sospecha del que firma este artículo de opinión es que la orden viene de arriba. ¿Tendrá el bueno de Mario una cláusula que le garantiza contrato del primer equipo si juega una determinada cantidad de partidos? 

Miguel Ángel Morro fue titular las primeras tres jornadas cuando Dimi estuvo k.o. por covid y Zidane ni soñaba con enfundarse la franjirroja. Fue el mejor en Mallorca. Pero llegó Tenerife y un error le ha costado no volver a jugar en Liga. Lo dije en mis redes sociales y no me escondo: desde entonces está sentenciado aunque la decisión no la tomó Iraola. 22 jornadas después de su última titularidad las cosas siguen igual.

A Martín Pascual todo el mundo le está juzgando por los errores de la temporada con Jémez. Y da igual que cuando haya aparecido este año haya estado correcto o al menos al mismo nivel que sus compañeros. 0 penalties cometidos, 1 tarjeta amarilla en 403 minutos de juego... Tiene que seguir aprendiendo, como todos los canteranos. Pero se le está criticando recordando errores del pasado cuando en el presente la zaga del Rayo es casi un desastre partido tras partido.

A todos ellos se les exige sin darles la confianza necesaria que da sentirse titular indiscutible. Jugar 5 encuentros seguidos (o 10) sin el temor a que un partido gris vaya a suponer dar con tus huesos en el banquillo. La exigencia es máxima. Como debe ser. La confianza, ya no tanta. No culpo a Iraola. Él ha llegado este año con la exigencia de ascender al equipo y no de promocionar la cantera. Tiró de ella cuando la necesitó y parece que no le han vuelto a dejar hacerlo. La culpa es de los chavales que no tiran la puerta abajo.