Una vez alcanzada la primera media hora del encuentro que enfrentó esta noche al Rayo Vallecano y al Athletic, y con motivo del segundo gol de los rojiblancos anotado por De Marcos, el ambiente se heló por unos instantes cuando la celebración de los jugadores con su afición provocaba la caída de varias decenas de seguidores vascos al ceder una de las barandas que separa el graderío del césped. Los jugadores bilbaínos rápidamente acudieron a socorrer a sus aficionados, mientras las asistencias del estadio se afanaban por ayudar a aquellos que sufrieron problemas físicos. Dos personas tuvieron que ser retiradas para ser atendidas por sendos golpes tras la celebración de un gol que acabó con susto.